Si prefieres recibir esta información en modo audio te invitamos a escuchar nuestro podcast: Cabal Cafe EP#21: Certificaciones orgánicas y sostenibilidad en las fincas: Café carbono neutral con Julia Ortega de México
En esta oportunidad entrevistamos a Julia Ortega, una productora de méxico quién nos compartió los retos a los que se ha enfrentado durante varios años para obtener la certificación en su finca y cómo ha logrado mantener su café bajo una producción orgánica.
Francy: Podrías contarnos un poco sobre donde estás ubicada y lo que haces dentro de la cadena?
Julia: Yo soy productora de café orgánico y café carbono neutral, me encuentro en la parte central de México, en la sierra norte de Puebla, es una zona cafetalera y montañosa. Es una finca de siete hectáreas, distribuidas en el cultivo, tenemos una reserva de bosque que eso también fue lo que nos ayudó a mitigar nuestra huella de carbono, independientemente de lo que arrojaron nuestros procesos de producción en la cantidad de emisiones.
Las variedades que nosotros tenemos se pueden decir tolerantes o resistentes a la roya, aunque ahora, por el cambio climático, nos damos cuenta de que ya no son tan resistentes, tenemos la variedad, costa rica y oro azteca principalmente. Ustedes podrían decir, oye, pero ¿por qué no tienes otras variedades conocidas? Si dices que vendes café de especialidad y esto es principalmente porque en la zona donde yo me encuentro es muy húmedo y por lo que habíamos analizado, serían muy factibles de que les pegara la roya y en el tema de ser orgánico y que te llegue la roya es casi la muerte, sin embargo, tuvimos la fortuna de tener una buena nutrición en el suelo y eso nos ha arrojado muy buenos resultados en taza.
Francy: De donde vino la idea de introducirse en el mundo del café especial y la producción orgánica?
Julia: Yo estudié administración de empresas, provengo de una familia cafetalera, sin embargo, yo veía el tema del café como un tema complicado, que había mucho trabajo en el campo, con precios muy injustos y eso me decepcionó porque yo decía cómo es posible que nos paguen el café así. Pasó el tiempo, me encontré con un amigo que tenía una reunión y me dijo que estaba trabajando para la fundación “Produce Puebla” en un proyecto de carbono neutral, pero para ganadería y le pregunté, oye, ¿qué es eso de carbono neutral? Y cuando él me explicó todo lo que hay detrás de una agricultura en carbono neutral se me hizo muy interesante.
En ese momento iniciamos 40 productores muy interesados, pero nos advirtieron que no era un camino fácil, no es que te vayas a convertir en carbono y orgánico de la noche a la mañana. Efectivamente, año tras año, varios compañeros se fueron saliendo, éramos 40 en Puebla y 20 entre Veracruz y Chiapas, o sea, las otras dos zonas productoras de café de México más importantes. Y hace dos años quedamos 12 productores y de esos 12 ahorita nada más quedamos seis. Para mí, fue un golpe terrible porque yo les decía, pero cómo si ya estábamos a nada de qué lograran lo de tantos años. Pero, no todos los productores del café tienen el mismo nivel académico, entonces, pues, imagínate en campo explicarle a una persona lo que es huella de carbón o huella ecológica cuando apenas tienen el nivel básico de educación primaria. Pues es, es muy complejo.
Para llegar a obtener una certificación, hay un trabajo atrás en campo de más de 10 años, considero que sin tener los recursos, el tiempo y conocimiento es difícil. Siempre creí que por el hecho de ser orgánico, ya estaba yo pagándole al planeta lo que estamos haciendo, pero al darnos cuenta de que utilizábamos más agua de la que se debe de utilizar, energía y demás, entonces sí, dije, tiene que haber otro modelo.
En la finca, cuando se hizo la medición de cuánto capturaba cada planta de café y cada árbol, fue muy importante la identificación de las especies de árboles y la edad de los árboles, porque dependiendo la edad, la especie y demás se puede saber cuánto está capturando cada árbol. Otra cosa que es importante también en el tema de carbono, es que vayas documentando cada parte de lo que estás haciendo; es un tema de mucha investigación.
Francy: cuáles serían esas prácticas agrícolas que han logrado implementar para reducir sus emisiones?
Julia: Lo que nosotros hemos hecho ha sido de ensayo y error. Es bien importante el tema de trabajar de la mano en campo con la flora y fauna. Pero yo lo que he visto en el tema del carbono es que va de la mano con la agricultura regenerativa y con la agricultura circular. Las acciones principales que hicimos fue que nuestras compostas las hicimos con insumos propios de la finca, le adicionamos minerales, que es el único elemento dentro de la composta que traemos de fuera con el fin de reducir nuestra huella también.
Francy: Nos puedes compartir un poco de los costos de todo esto, los esfuerzos de tu parte. Y si con esto has podido acceder a un mejor precio por tener estas certificaciones.
Julia: Yo te puedo decir que hasta la tercera cosecha, empezamos a ver los resultados de ese tipo de certificaciones porque la certificación orgánica de por sí es costosa, súmale que una certificación en huella de carbono es como si pagaras tres certificaciones juntas porque esa certificación es cada tres años, ahí donde dices tengo que de alguna manera poder hacer sustentable esta parte de del café. Y realmente lo hicimos junto con mi esposo, porque la verdad él me apoya mucho en el tema agrícola. Muchos nos tildan de locos, diciendo que este modelo no funciona, nadie se los va a comprar, etc.
Cuando nos certificamos todo cambió. ¿Cómo lo hicimos? Bueno, pues trabajando café de especialidad porque no había otra opción, aunque yo vendiera mi café, a un precio bueno por ser orgánico que con eso ya tiene un plus, pero por ser huella de carbono ya tiene otro precio en especialidad. Y es por eso que en algunas ocasiones entro a este tipo de concursos más que nada para estar en subastas, pero creo que si fuera así nada más y nada que me respaldara, yo diría que no es rentable, al menos en los primeros tres, cuatro años, creo. Sin embargo, a nosotros nos ha resultado, nos está abriendo las puertas, ya empieza el interés por más empresas en el mundo en querer comprar nuestro café y al menos los clientes que he encontrado si tienen una preocupación por el tema, tanto así que en sus cafeterías ya están implementando medidas para reducir sus emisiones.
Para sostener el negocio, vendo café de especialidad en verde, vendo café tostado, hago recorridos turísticos, vendo subproductos de café como licor de café, jabones, etc. Todo esto para tener otros ingresos durante esos seis meses que no tengo cosecha.
Otra cosa que me ayuda mucho es compartir esta información cuando nos visitan especialmente universidades o niños, se les hace muy interesante todo lo que hay detrás de una taza de café, pero desde este punto de vista, por ejemplo cómo podemos ahorrar agua o cuando hay cosecha yo nunca pensé que que la bicicleta despulpadora fuera a tener un impacto en las personas, entonces, estas acciones ayudan para vender, pero también ayudan mucho para hacer conciencia y los clientes se van más conscientes de pagar un mejor precio, no elevado, pero si un precio justo.
Francy: Hemos llegado al final de esta conversación, seguramente continuaremos la discusión de este tema tan amplio con historias de otros productores que como Julia, cada día trabajan por una agricultura sostenible. Estos 20 minutos de conversación fueron tomados de una de las sesiones en vivo que tenemos con la comunidad en español en Discord. Si deseas ver toda la conversación, ya está disponible en youtube, allí vas a poder ver la opinión completa de Nathalie y los demás participantes.